El TDAH: Historia, Causas y Cómo Afecta a la Vida Diaria. El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) es una condición que afecta a millones de personas en todo el mundo.
La primera descripción del trastorno fue en 1902 por el pediatra británico Sir George Still. En el Colegio Real de Médicos de Londres, Still describió a niños que presentaban un “defecto de control moral” que les impedía controlar su comportamiento, impulsividad y concentración.
El TDAH: historia, causas y cómo afecta a la vida diaria
Estos problemas, según él, no estaban relacionados con la inteligencia ni con la crianza, sino que parecían tener una base en el desarrollo. Las observaciones de Still fueron el primer paso en el estudio de lo que luego se conocería como TDAH.
Desde las observaciones de Sir George Still, la comprensión del TDAH ha avanzado notablemente, y con ella, la calidad de vida de quienes conviven con el trastorno. Con un diagnóstico y tratamiento adecuados, muchas personas con TDAH pueden llevar vidas productivas y satisfactorias.
¿Qué es el TDAH?
El TDAH es un trastorno neurodesarrollativo que afecta la actividad cerebral, influyendo en el comportamiento, la concentración y la regulación emocional. Las personas con TDAH experimentan dificultades para concentrarse, controlar impulsos o permanecer quietos. Los expertos señalan que tiene una base genética y neurológica, afectando áreas del cerebro relacionadas con el autocontrol y la atención.
Principales síntomas del TDAH
El TDAH se caracteriza por dos tipos de síntomas: inatención e hiperactividad-impulsividad.
- Inatención:
- Dificultad para concentrarse en tareas.
- Cometer errores por descuido o distracción.
- Parecer no escuchar cuando se le habla.
- Problemas para organizar actividades o completar tareas diarias.
- Hiperactividad e impulsividad:
- Inquietud y dificultad para permanecer quieto.
- Necesidad de estar en movimiento.
- Hablar excesivamente o interrumpir.
- Dificultad para esperar turnos y actuar de forma impulsiva.
¿Por qué ocurre el TDAH? Causas y factores de riesgo
Aunque se desconocen las causas exactas del TDAH, se cree que influyen factores genéticos y ambientales.
- Genética: El TDAH es un trastorno hereditario que suele presentarse en familias.
- Factores ambientales: El consumo de tabaco o alcohol durante el embarazo se asocia con un mayor riesgo de TDAH en los hijos.
- Desarrollo cerebral: La investigación sugiere que el TDAH está relacionado con un desarrollo cerebral distinto, en áreas que regulan el autocontrol y la concentración.
Diagnóstico del TDAH
El diagnóstico del TDAH es clínico y se realiza mediante una evaluación detallada que puede incluir entrevistas, cuestionarios y observación de síntomas en diferentes contextos. Profesionales como psiquiatras, psicólogos o neurólogos especializados en trastornos del neurodesarrollo suelen encargarse de esta tarea.
Tratamientos disponibles para el TDAH
El tratamiento del TDAH se aborda desde varios frentes:
- Medicamentos: Los fármacos estimulantes, como el metilfenidato o las anfetaminas, ayudan a mejorar la concentración.
- Terapia conductual: Facilita el control de impulsos y la mejora de habilidades sociales.
- Apoyo educativo: Adaptaciones en el entorno escolar y estrategias pedagógicas específicas son clave para el éxito académico.
- Psicoeducación familiar: La formación de los familiares ayuda a reducir la frustración y a brindar mejor apoyo.
Consejos para convivir con el TDAH
Para quienes viven con TDAH, existen estrategias que pueden mejorar su calidad de vida:
- Organizar el tiempo: Usar calendarios y listas de tareas ayuda a la organización.
- Evitar distracciones: Crear un entorno de trabajo adecuado mejora la concentración.
- Establecer rutinas: Las rutinas ayudan a reducir el estrés y aumentan la eficiencia.
- Ejercicio físico: La actividad física puede mejorar la atención y reducir la hiperactividad.