Una condena de un año de cárcel es la pena impuesta al acusado de soltar cebos con alfileres durante varios años en distintos parques de la ciudad de Ourense.
El varón de 60 años que causó numerosos daños a varios perros creo con su método una gran sensación de inseguridad y miedo a los dueños de los perros.
Un año de cárcel por soltar cebos con alfileres
El «modus operandi» consistía en dejar trozos de carne que contenían alfileres para que produjesen daño físico a los perros al comerlos. Uno de esos casos fue el de un perro que tras llevarlo al veterinario le extrajeron un total de 180 alfileres de su intestino.
Esta condena supone que el acusado no pisará la cárcel tras el acuerdo alcanzado con la fiscalía a no ser que vuelva a delinquir en un plazo de 24 meses. Además, no podrá tener animales durante un plazo de 3 años ni realizar actividades relacionadas con ellos.