Anecdotario de «mamás reales» – Feliz Día de la Madre
¿Que por qué mamás reales? Porque las mamás somos eso: mamás. Ni somos superheroínas, ni robots multifunción, ni gestoras familiares, ni «coach» de vida de nadie. Ni siquiera esas dulces, comprensivas, perfectas e impolutas «supermamás» que la dictadura de la imposición de roles nos quiere otorgar.
Hoy compartiremos algunas anécdotas personales que nos pasan y que contamos a otras mamás, muchas veces entre risas, otras con cierto halo de culpa. Todas ellas chocan directamente con los cánones de lo que se entiende por «buena madre». Cánones irreales, injustos y profundamente patriarcales.
En el día de la madre, vamos a recordar que el simple hecho de serlo ya es «lo más», que no hay que llegar a todo, no hay que rozar la excelencia, ni ponernos en segundo plano por el bien de la familia. NO. Somos mamás y eso ya es «la caña», aunque olvidemos los cumpleaños o necesitemos salir corriendo para tomar algo con las amigas y hablar mal de nuestros hijos.
Anecdotario de «mamás reales»
Lou
«Capítulo 1 da malanai: o luns estivo o pequeno de cumpre. Esquecín facerlle unha tarta e cando quixen inflarlle o globo xigante co número 2, a bombona de helio estaba baleira… e como xa era tarde e todo me saíu ó revés, en vez de decorar como se puidera e darlle unha sorpresa como planeáramos, abrín unha birra e espanzurreime no sofá.
Polo menos recibino «contentilla». ¡Que mellor cumpre que unha nai alegre!»
Irene
«Creo que he llegado a estar una semana sin ducharme. No estoy segura. Perdí la cuenta de los días. «
Patri
«En mi primer posparto, durante dos semanas me lavé el pelo con mascarilla pensando que era el champú. Parecía un perro de aguas y no sabía por qué.»
Lou
«Estando embarazada, tiña sempre tanto sono que, un día, como ía ben de tempo para ir buscar á maior ó cole, senteime no sofá e pensei: «vou pechar os ollos dous minutos e marcho», e quedei frita. Non fun recoller á nena e tampouco avisei a ninguén para que a fora buscar. Chamoume a titora preguntando se había pasado algo. ¿Como lle explicaba que estaba sopa no sofá?»
Mari
«Lo primero que hicimos al llegar a casa del hospital fue cambiar a nuestro bebé. Su primer pipí y popó fueron por encima de papá… Y por la puerta del armario… Y por las cortinas…»
Lou
«O meu fillo só ten roupa interior de nena: Bodies, pixamas, calcetíns… aquí hérdase todo».
Emma
«¿Cuántas veces os paseasteis con una teta fuera por el parque?»
Irene
«El otro día fui a hacer pis y me hizo una ilusión tremenda hacerlo sin espectadores»
Bego
«Creo que me estoy convirtiendo en mi madre. El otro día le dije a mi hija:
¡Ni peros ni peras! ¡Como tenga que ir yooo!»
Noa
«Escondo el chocolate, no para que no lo coman mis hijas. Lo hago para zampármelo todo yo»