¿Qué falla en la educación? – Helena Iglesias Rodríguez
A mis 33 años, llevo 13 años como profesora de refuerzo educativo, dando clases particulares y dirigiendo una academia. Todos los días me pregunto aún ahora que traspasé, ¿qué no falla?
¿Qué falla en la educación?
En cuarenta y seis años de democracia han pasado 8 leyes y un pacto de estado fallido, lo que, en reales decretos, currículos, decretos, eso implica. ¿Qué intereses tienen nuestros políticos en no sentarse y sacar un pacto de estado de educación? Pues que sea un arma arrojadiza en congreso, senado, debates y platos de televisión, así como en los parlamentos de las comunidades autónomas. Necesitamos un pacto de estado en educación para contar con la estabilidad, tener leyes educativas blindadas y no dar bandazos. Debemos ponernos al día con objetivos, métodos, recursos, innovación, crear comisiones de expertos y un calendario que contemple las aportaciones de los profesionales desde el aula, clases de refuerzo hasta el ministerio.
El profesorado del sistema educativo reglado no para de alzar su voz de que faltan recursos, pero las administraciones públicas competentes parece que miran hacia otro lado. En ocasiones, son los propios docentes del sistema educativo reglado los que se ofenden y nos llaman intrusos, pero completamos lo que las administraciones no hacen, aun siendo conscientes de que mucho alumnado en situación vulnerable no puede hacer frente a ciertos gastos. Ese alumnado abre una gran brecha en desigualdad y cada vez mayor debido a la pandemia y a la crisis económica provocada por esta.
Los mayores retos que deben afrontar las administraciones
- En primer lugar, la ratio. Con 25 alumnos en un aula con diversidad, 1 alumno con ACI, 1 alumno que no conoce el idioma, 2 alumnos que su nivel competencia está por debajo del resto de la clase en las instrumentales y 3 que están por encima, un profesor no puede dar una clase en condiciones optimas. Ni siendo Superman uno es capaz de sacar adelante a todos los alumnos en igualdad de condiciones y con una atención personalizada.
- En segundo lugar, porque en ocasiones deben retirar el apoyo a unos y ofrecérselo a otros porque la Xunta no dota a los centros del personal necesario. En Galicia se reducen los especialistas de PT y AL año tras año, los departamentos de orientación ven como se llenan sus mesas de expedientes y no dan avanzado (cada vez existe un mayor número de alumnado con algún tipo de necesidad). Si hablamos de los Equipos de Orientación Específicos ya es un mundo a parte, van a su ritmo y el identificar precozmente no va con ellos.
- Y en tercer lugar porque no tienen los recursos necesarios, una gran cantidad de alumnado solo dispone del colegio para escapar de la desigualdad y evitar la pobreza evitando la brecha social. Por ello debería apoyarse con horarios extraescolares, becas para familias en riesgo de exclusión social, especialistas, etc… pero parece que no interesa.
Selección del profesorado
Otro de los principales problemas es la falta de formación del profesorado generalista en necesidades educativas especiales, siendo esto un problema fundamental dado que se retrasan los diagnósticos y atenciones de las dificultades específicas de aprendizaje. La selección del profesorado ha quedado obsoleta con un temario del 97 y sin anonimato en el proceso de selección que en ocasiones puede resultar enchufista y surrealista, donde la OPE no se realiza con calidad y garantías. No necesitamos un profesorado con tanta retentiva sino un profesorado activo, con herramientas.
La educación no puede cambiarse ni modernizarse con decretos ni los profesores irse formando a la vez que van educando (si, si, cuando tienen a alumnos de necesidades educativas especiales). No miremos hacia otro lado, seamos realistas con lo que sucede. En Secundaria un simple máster no sirve para enseñar a enseñar, así nos encontramos a alumnado que no entiende nada de lo que le explican. Deberíamos copiar modelos de elección de profesorado como Finlandia o Singapur, pero sea cual sea el modelo elegido que vayan con vocación, por favor.
Padres buscando ayuda
Después de todo esto llegan los papás desesperados a los centros de refuerzo, academias, particulares, en ocasiones llorando de desesperación viendo como sus hijos se pierden a pesar de estar encima porque el sistema falla. Te sientas con ellos, te tomas un café y te comprometes a sacarlos adelante, no sin encontrarte millones de inconvenientes comienzan a contarte:
“Una mamá llega a tu despacho y te habla del acoso escolar y como el centro escolar mira para otro lado, otra del retraso madurativo que poco a poco ha ido calando en el niño, otro papá te habla de la incompetencia de una tutora de infantil con la que su hijo lleva desde los tres años y que no detectó una lateralidad cruzada y otras necesidades especiales. Lo que si coinciden todos los papás que se han sentado a lo largo de los años en mi despacho es que aunque se encuentran infinidad de profesionales con vocación, también se encuentran mucho profesorado sin vocación que perjudica seriamente y daña en muchos casos psicológicamente a los niños.”
Un tema recurrente curso tras curso en mi despacho y creo que generalizado por lo que llevo comentado con compañeros es encontrarnos a alumnos que van a refuerzo educativo, que los sacan del aula, que a los padres no les explican bien el mecanismo y que se encuentran con la desagradable sorpresa que a la hora de los exámenes les exigen lo mismo que a sus compañeros sin haberlo dado.
Una tarea común de todas las partes
Podría seguir escribiendo y comentando al igual que mis compañeros lo que nos encontramos día a día, pero eso no es lo importante. Lo importante es cuando logramos el compromiso y las ganas de sus tutores de sacar adelante a los niños y todos trabajamos coordinados que suelen ser muy pocas veces y las más nos toca trabajar por libre. En ocasiones, tenemos el apoyo de los dos padres y otras veces nos encontramos que solo uno intenta remar para que su hijo no se hunda. A veces… cuantas situaciones.
Después de todo lo que nos encontramos que falla en el sistema educativo, cuando nos ponemos a trabajar con nuestros niños si existe algo en los que en todos o casi todos fallan son tres cosas: competencia matemática, comprensión lectora e idiomas. Como voy pretender que se memoricen las Guerras Carlistas si no comprenden lo que leen y mucho menos si se lo ponemos en otro idioma. Como le pongo un problema de trigonometría si no sabemos las operaciones básicas y no saben lo que se le pide.
Los profesores de refuerzo
Así es como nos llegan los alumnos a los profesores de refuerzo, sin contar las veces que llegan con 9, 10 u 11 años sin diagnosticar de nee. ¿Cómo es posible que alumnos con nee, cuando llegan al instituto se dejen a manos de Dios? ¿Cómo es posible que los profesores no tomen las medidas necesarias cuando los psicólogos llaman a los orientadores y se media? Pues es a los profesores de refuerzo en ocasiones a los que nos toca sacar a estos niños adelante.
No solemos hacerle las tareas, les enseñamos a pensar, buscamos tareas alternativas, cambiamos cifras y en ocasiones explicamos ejercicios que no entienden una y otra vez. Aunque de cara a profesorado de enseñanza reglada les hacemos las tareas, ni avanzamos materias de forma generalizada, como en todas las profesiones, existe de todo y sobre todo mucho intrusismo.
En academias, centros educativos y profesores de refuerzo hacemos una labor de detención de lagunas del alumno, explicamos una y otra vez hasta que comprenden las dudas dado que en ocasiones en los centros educativos no son explicadas, no los entienden, o no se atreven a preguntar. Los papás nos buscan para que aprueben, complementen su aprendizaje y les enseñemos las herramientas que en los centros docentes no les dan. Aunque el sistema educativo debería buscar la excelencia hoy en día no es así.
¿Qué demando yo como profesora de refuerzo?
Lo mismo que mis compañeros de la enseñanza reglada, excelencia educativa, intercomunicación entre enseñanza reglada y centros de refuerzo, olvidarnos de tantos contenidos y dar más instrumentos. Que necesario es atender las nee adecuadamente, incentivar y motivar a los niños, hacerlos felices. Pero sobre todo debemos buscar entre todos los entes un modelo educativo que se adapte a la época en la que estamos, no rivalizamos entre instituciones publicas, privadas o concertadas; enseñanza reglada o no reglada,… buscamos la formación de los niños.
No podemos tener a niños en un centro educativo desde las 9 de la mañana a 14 h o desde 8:30 a 14:10 y después 2 o 3 horas en refuerzo, estudio en casa, extraescolares,… ¿Criamos niños o adultos? Los niños y adolescentes deben jugar, relacionarse con iguales, deben aprender a trabajar de forma autónoma y sobre todo, vivir la etapa que les corresponde.
HELENA IGLESIAS RODRÍGUEZ – Profesora de refuerzo durante 13 años.