Las campanadas: Origen y tradiciones alrededor del mundo.
Cada fin de año, millones de personas se congregan frente a relojes emblemáticos, televisores o plazas principales para dar la bienvenida al año entrante al son de las campanadas.
Las campanadas: Origen y tradiciones alrededor del mundo
Más allá del alimento que acompañe la celebración, las campanadas marcan un momento de unión y reflexión. Representan el cierre de un ciclo y la esperanza de nuevos comienzos. Este instante, compartido con amigos, familiares o incluso desconocidos, se convierte en un recordatorio de la importancia de la comunidad y los deseos compartidos de felicidad y éxito.
Las campanadas no solo anuncian el cambio de año, sino que también conectan culturas y generaciones a través de tradiciones que, aunque diversas, comparten un mensaje universal de esperanza y renovación.
Esta celebración es una de las tradiciones más extendidas en el mundo, pero ¿de dónde surge y cómo se celebra en diferentes culturas?
El origen de las campanadas
La tradición de marcar el cambio de año con campanadas proviene de la necesidad de organizar el tiempo en las sociedades antiguas. Los relojes mecánicos, introducidos en Europa durante la Edad Media, se instalaron en las iglesias y torres principales de las ciudades, y sus campanas anunciaban horas importantes o eventos destacados. Con el paso del tiempo, se utilizó este sistema para celebrar la llegada del nuevo año.
En España, el rito de las campanadas se consolidó en 1909, cuando un excedente de uvas en Alicante llevó a los agricultores a popularizar la costumbre de acompañar cada campanada con una uva, como símbolo de buena suerte. Desde entonces, las doce campanadas y las doce uvas se han convertido en el emblema de la Nochevieja española.
La tradición de las uvas
En España y en varios países de habla hispana, las uvas son el elemento central de la celebración. Se toman doce uvas, una por cada campanada, representando los doce meses del año. La creencia popular asegura que si se logra comer todas al ritmo de las campanadas, se garantiza un año lleno de suerte y prosperidad.
Esta costumbre ha traspasado fronteras y se ha adaptado en países como México, Argentina y Chile, aunque a menudo con ligeras variaciones locales.
Alternativas a las uvas alrededor del mundo
Aunque las uvas son protagonistas en España, otros países tienen sus propias formas de celebrar la llegada del año nuevo:
- Italia: Se acostumbra comer lentejas, simbolizando riqueza y prosperidad debido a su forma, que recuerda a pequeñas monedas.
- Japón: Las campanas de los templos budistas suenan 108 veces, siguiendo la tradición del “Joya no Kane”, que busca purificar el espíritu de los 108 deseos terrenales según el budismo.
- Estados Unidos: Aunque no hay un alimento específico, se destaca el brindis con champán en eventos como el icónico descenso de la bola en Times Square, Nueva York.
- Brasil: Es costumbre comer siete granos de granada o lentejas como símbolo de abundancia. Además, muchos visten de blanco como deseo de paz.
- Dinamarca: Una tradición peculiar es romper platos viejos frente a las puertas de amigos y familiares como muestra de afecto y buenos deseos.
- Filipinas: Se consumen frutas redondas, ya que su forma simboliza riqueza. Además, las familias suelen vestir ropa con estampados de círculos para atraer prosperidad.
Otras tradiciones en el cambio de año
El cambio de año también está marcado por rituales que buscan atraer buena suerte y prosperidad:
- Colombia: Muchas personas corren con una maleta vacía alrededor de la cuadra para atraer viajes en el año que comienza.
- Escocia: Durante el «Hogmanay», se celebra el «First Footing», donde el primer visitante que cruza el umbral de una casa trae regalos como carbón, pan o whisky, simbolizando buena fortuna.
- Rusia: Es común escribir un deseo en un papel, quemarlo, y mezclar las cenizas con la bebida para consumirla justo a la medianoche.
- Grecia: Se corta un pastel conocido como «Vasilopita» que contiene una moneda en su interior; quien la encuentra tendrá suerte durante el año.
- Sudáfrica: En algunas ciudades, las personas arrojan muebles viejos por la ventana como símbolo de dejar atrás lo negativo del año anterior.
- India: En el sur del país, se realiza un ritual llamado «Puthandu», donde las casas se decoran con dibujos de polvo de arroz y se intercambian dulces para comenzar el año con buenos augurios.