Entrevista con Emilio Rúa

Ourense na rede ha podido realizar una entrevista con Emilio Rúa. La conjunción de varias circunstancias propició una amena charla con Emilio donde nos mostró su cara más amable.

Emilio, la persona que está detrás del reconocido artista, es un chico sencillo, accesible, dispuesto y sobre todo, tremendamente humilde.

Fué un placer para Ourense na rede realizar esta primera entrevista a Emilio, en ella, nos mostró el interior de su profesión, lo que podemos encontrar detrás de una canción, de una letra, de un sentimiento.

Una radiografía a este músico de Ourense que mantiene los pies en el suelo para seguir trabajando en una prolífica carrera musical. 10 discos adornan su vitrina y se convierten en un excelente curriculum para quien se codea con artistas nacionales de renombre.

Emilio, gracias.

Los inicios de Emilio Rúa

Iniciaste tu trayectoria a los 7 años en un grupo musical familiar, ¿qué supuso para ti la música en esos primeros años?

Bueno, empezar con siete años pues imagínate, creo que me lo tomaba realmente como un juego, era como ir a tocar. Supuso el comienzo de todo, porque realmente, es la base de lo que soy hoy en día. Si no fuese por esa orquesta, seguramente no sería la misma persona, eso seguro, y creo que tampoco sería el mismo músico.

¿En qué momento supiste que la música te acompañaría a lo largo de tu vida?

Cuando dejamos el grupo yo tenía quince años y seguí estudiando el bachiller pero cuando llegué a la universidad me di cuenta de que ese no era mi camino. Tenía que buscar, fuese cual fuese ese camino, en otro lado. Me di cuenta que realmente era la música porque empezaba a hacer mis primeras composiciones. Me gustaba mucho la música actual que había en aquella época y al final dejé la universidad y empecé mi camino en la música.

¿Algún referente en tu formación musical?

Unas de las primeras canciones que canté fué “campanera” porque la cantaba en el grupo y era inevitable que no cantase esa canción. Después sí que empecé a escuchar otras canciones que tenían mis hermanos que son mayores que yo. Me cautivó «Hotel California» de los Eagles, ese sólo de eléctrica, que nunca fui de hacer solos porque nunca los aprendí pero me emocionaba y de ahí pues a los Beatles y autores como Antonio Vega.

¿Te consideras un autodidacta?

Si, si. Tuve mis conocimientos musicales de solfeo hasta quinto año y de guitarra hasta el segundo pero realmente era muy vago para ese tipo de aprendizaje. Todo lo que aprendí después en la guitarra fué por mi cuenta. Realmente, también es cierto que esos dos años de guitarra me ayudaron un poquito a saber cómo arpegiar, saber cómo dominar esa forma de tocar y me sirvió de ayuda, pero bueno, totalmente autodidacta.

¿La formación reglada está sobrevalorada?

Bueno, yo creo que es necesario también para entendernos entre los músicos. Muchas veces, el no saber hacer una partitura con exactitud tiene sus contras y yo creo que tener una base que sea común para todos, para entendernos en ese lenguaje musical, es necesario. Ahora, que sea en una institución u otra pues creo que ahí está digamos la diferencia.

¿Consideras que la formación musical que se oferta en conservatorios o escuelas, va en la línea de la oferta laboral existente?

Yo diría que no y creo que realmente no sólo es un problema de si el conservatorio es útil o no es útil. Siempre hay esa cuestión que todo el mundo se plantea. Yo creo que también está en la educación de base de las familias, los ministerios y todo lo que ocupa al gobierno. Yo creo que entender la música cuando tú tienes un hijo que quieres que estudie música y luego cuando sea mayor no quieres que ejerza de músico, no tiene sentido y yo creo que es la tónica dominante en la sociedad.

¿Qué formación necesita un joven que quiera recorrer tú mismo camino?

Pues yo creo que principalmente tener un nivel de educación aceptable. Después yo creo que buscar, digamos, no sé si una educación reglada como decíamos en instituciones o una formación que también puedes obtener por tu cuenta pero sobre todo, yo lo veo fundamental, pues ser buena persona.

Decía Pablo López “Ambiciono ser feliz sin dejar cadáveres por el camino”, ¿crees que es posible?

Una pregunta curiosa. Hombre, yo creo que dejar cadáveres por el camino no sé a qué se refiere exactamente, pero bueno, yo creo que para ser feliz no tienes que darle una patada a ninguna persona.

¿Existe colaboración en el mundo de la música?

Si, si, realmente, y muchas veces muy gratas y sorprendentes de quién menos te lo esperas a veces pero yo, por mi experiencia, siempre me he considerado bastante afortunado en ese sentido.

Emilio Rúa, el cantautor

Te etiquetas como cantautor, ¿eso abre o cierra puertas?

Bueno. Creo que diferencia un poco ¿no?, porque realmente desde que empecé todo tiene que estar etiquetado y realmente sí que me siento más próximo a un cantautor que a un grupo. Evidentemente, a veces ¿puedes pensar que te puede abrir o cerrar puertas? si, pero bueno, yo creo que es una manera de diferenciarte del resto. Creo que cantautor es algo que va existir siempre, creo que en ese sentido pues también me ha abierto bastantes puertas la verdad

“La figura del cantautor está hoy en día bastante desvalorizada”, palabras tuyas, ¿qué ha contribuido a ello?

Hombre yo creo que el rumbo que ha tomado la música desde hace bastante tiempo. Aparte de todo el sistema de digitalización ha hecho que eso de tocar una guitarra y hacer canciones de la forma más primitiva quede un poco obsoleto a veces. Soy consciente de que sí que está desvalorizada en ese sentido, en el sentido de la industria musical, pero en el sentido de la sociedad yo creo que no, porque hay una parte de la sociedad que sí considera que son imprescindibles.

¿Qué papel jugáis los cantautores en un momento donde el espectáculo está más valorado que la propia música y las letras?

Es una forma diferenciadora del resto. Yo creo que siempre pasaremos por etapas, etapas del mundo de la canción de autor que ha sido muy buenas, otras no. Ahora estamos en la canción de autor viviendo un buen momento pero no es la canción de autor típica, el típico cantautor con su guitarra y sus canciones. Yo creo que siempre pasará por esos altibajos y volverán tiempos mejores seguro.

Tal como está la escena musical en la actualidad, los cantautores ¿sois los guardianes de la esencia?

(Pausa reflexiva) Pues es bonito, estaría bien que fuese así. Yo creo que intentamos guardar esa idea de cómo se hacen las canciones, que es simplemente con una guitarra o con la voz. Creo que hay que pensar en ser esenciales y también recordarle a la gente que hay algo en la música que no se puede ni comprar ni imitar, que es la sensibilidad y creo que sin eso, un cantautor no tiene mucho fundamento.

¿Puede llegar un cantautor a grandes masas?

Si, desde luego que sí. Muchos cantautores han sido testigo de ello.

Se te acerca un adolescente y te dice: Emilio, quiero ser cantautor, ¿lo animas y aconsejas, o le dices que se dedique a otra cosa?

Lo animaría totalmente, como sí me dice que se quiere dedicar a chapista. Desde luego lo animaría, nunca sería capaz de decirle a una persona que tiene ilusión algo que lo cortase.

Te dedicas profesionalmente a la música, ¿se quedan muchos por el camino?

Me imagino que sí, claro. De hecho, desde que empecé yo, recuerdo muchos nombres de gente que no siguió su trayectoria. Otros si y funcionaron muy bien. Evidentemente, como todo en la vida, hay gente que lo tiene claro y sigue adelante y otra gente que no lo tiene tan claro. Depende de la vocación que tengan.

Serrat cantaba al Mediterráneo, ¿Emilio Rúa canta a Galicia?

Realmente siempre he cantado a Galicia. En todas las canciones que tengo siempre hay algo que lo refleja, pero bueno, sí que es verdad que también soy consciente que canto a otras cosas que también se ve que son evidentes, al amor a las desigualdades o temas un poco más duros.

¿Te ha perjudicado cantar en gallego?

No, realmente nunca he visto ninguna traba por cantar en gallego. Si a lo mejor en la forma de vendernos o de llegar a otros circuitos que no podemos llegar porque creo que es un problema actual del sistema que vivimos, pero creo que mucha gente está deseando escuchar cosas diferentes en diferentes idiomas y creo que el problema no es el idioma.

El concepto de cantautor, ¿ha cambiado desde Serrat a la actualidad?

Evidentemente. Yo siempre intento reflejarlo en el sistema musical que vivimos. La industria que es lo que mueve un poco las grandes masas, ha cambiado en ese sentido. En el resto, para la gente de a pié cómo puedo ser yo como cantautor, pues no ha cambiado mucho porque seguimos haciendo las mismas cosas que hacíamos hace años. Sí que en el nuevo sistema musical ha cambiado mucho porque es una figura que no sé si ha ido evolucionando pero sí que ha cambiado o está un poco en stand by.

En tiempos de crisis social, ¿es más fácil escribir la letra de una canción?

Hombre, estás más resentido. También pueden salir canciones que son muy malas si no se tratan bien los temas. Creo que hay que ser muy cautos a la hora de hablar de algo así a la ligera. Hablar por hablar todo el mundo lo puede hacer y lo hacemos, pero otra cosa es ponerse en la piel de los demás, eso es una tarea muy difícil.

Los cantautores cantáis sobre las desigualdades sociales, ¿es un recurso o sentís la necesidad de denunciarlas?

Yo creo que hay que exponerlas y cuantas más voces existan en el mundo que diga que esto no está bien, pues mejor.

Vende más, ¿cantar al amor o al desamor?

Bueno yo diría que… (pausa para pensar) no sé qué es lo que vende más. Creo que una canción, hable de lo que hable, sí está bien da igual que sea de amor o desamor.

¿Por qué os cuesta tanto a los cantautores, cantar sobre temas alegres?

Bueno yo creo que a veces no es una verdad en toda regla. Siempre ha existido pues esa esa idea de que el cantautor es el típico guitarrista con una tristeza y yo creo que no es así. Porque detrás de muchísimos artistas hay canciones cuyo sentido se aleja mucho de la tristeza.

En la canción “Europa do leste” tocas el tema de la inmigración, ¿cómo se combate este drama humano?

Es difícil, como hablamos antes, son los problemas que nos atañen a todos, que están ahí y siempre son complicados. En ese tema concretamente, hablo de alguien que viene de Europa del este a trabajar y no viene a delinquir como muchas veces se piensa en la calle, que la gente viene aquí a robar y mayoritariamente vienen a trabajar. Como ellos vienen, otros también iremos y también fuimos. Hay que ponerse siempre en el lado positivo de todo, si no, apaga y vámonos.

En varias canciones, tus letras tratan sobre la importancia de vivir el momento y la incertidumbre del futuro. ¿Ves el futuro con ilusión o crees que esto se está poniendo muy complicado?

Procuró verlo con ilusión. A mí lo que me mantiene con los pies en la tierra es saber que hoy tengo algo en mente para poder hacerlo mañana. Me gusta pensar de esa manera, tener la ilusión para seguir cantando porque quiero hacer esa canción mañana o seguir haciendo discos. Creo que hay que ser optimistas porque la situación lo requiere.

¿Qué le diría el Emilio Rúa de ahora al del primer disco?

Pues que ha tenido mucho valor para mantenerse de fiel a sus principios.

Entrevista realizada en el Salón Noble del Liceo de Ourense gracias a la colaboración de José Luis Troitiña, Gerente del Liceo.